Quienes deciden invertir en el sector inmobiliario actualmente en el país ven las consecuencias positivas de la apertura para sus negocios en materia de inversión extranjera y dinamización del mercado, entre otros factores.
El imaginario colectivo actualmente dictamina que los precios de vivienda nueva en algunas ciudades se han disparado en los últimos años. Y si bien esto es muy cierto, es erróneo generalizar, pues no todo el sector inmobiliario se mueve en el mismo ciclo. El sector en general goza de estabilidad y potencial de valorización en algunos sectores, principalmente el industrial, el cual sigue siendo uno de los principales motores que sostiene y jalona la economía colombiana.
Existe un potencial muy interesante en los sectores de comercio, bodegas y oficinas. Incluya en sus posibilidades de inversión sectores diferentes a vivienda, pues hay un importante nivel esperado de valorización en los próximos años. Otro factor positivo es el interés de nuevos inversionistas extranjeros que buscan establecer alianzas o negocios con firmas locales.
Tenga en cuenta que la inversión en el sector inmobiliario guarda una baja correlación con los demás activos de la economía como bonos y acciones, lo que constituye a los inmuebles en un elemento atractivo para considerarlo como un foco de inversión. La fortaleza, estabilidad y crecimiento del sector inmobiliario son un hecho.
Las inversiones inmobiliarias en Colombia son generalmente inversiones a mediano y largo plazo. La rentabilidad se mide teniendo en cuenta la valorización y los ingresos provenientes de las rentas netas anuales. Esta rentabilidad depende del tipo de bien, de su localización, de su mejor y mayor uso, de la facilidad de arrendamiento y de la posibilidad de generación de rentas netas positivas. Por estas y muchas otras razones, invertir en el sector industrial es una excelente opción, pues los enormes beneficios que trae este tipo de inversión harán que siga cobrando protagonismo.
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