Estas áreas especializadas no son solo espacios de comercio; representan un motor vital para la economía, la innovación y la internacionalización del país. En este análisis, exploramos cómo las Zonas Francas en Colombia están abriendo puertas a un futuro prometedor y cuáles son los beneficios que aportan a Colombia.
Hoy en día existen 124 zonas francas repartidas en 20 departamentos, Colombia muestra claramente su nivel de apuesta por estas áreas de desarrollo. Estas Zonas Francas en Colombia, que incluyen 82 permanentes especiales y 42 permanentes, atraen inversiones significativas, ascendiendo a aproximadamente 11 mil millones de dólares.
Lo más interesante es que no solo se centran en los sectores de industria y servicios, sino que también fortalecen el sector agroindustrial, crucial para la economía nacional. Estas cifras son un reflejo tanto del tamaño de la inversión, como de su impacto territorial y sectorial.
Uno de los mayores triunfos de las Zonas Francas en Colombia es su capacidad para generar empleo, con más de 152,000 puestos de trabajo creados.
Además, estas zonas son un catalizador para micro, pequeñas y medianas empresas, constituyendo aproximadamente el 90% de las empresas allí instaladas. Este dato es crucial, pues demuestra cómo las zonas francas son inclusivas y accesibles para negocios de todos los tamaños, potenciando así la economía desde sus raíces.
A diferencia de otros países, Colombia no tiene exenciones tributarias diferenciadas más allá de la tarifa de impuesto sobre la renta.
Sin embargo, su régimen especial en comercio exterior es notable y muy atractivo para los inversores, ya que no se aplican aranceles ni IVA a las importaciones en estas zonas.
El resultado de todo esto son menos costes operativos y mayor competitividad en los mercados internacionales.
La reciente reforma tributaria en Colombia y el fallo de la Corte Constitucional representan un hito en términos de estabilidad jurídica y respeto a las inversiones.
La decisión de mantener la tarifa de renta del 20% para empresas calificadas antes del 13 de diciembre de 2022 fortalece la confianza de los inversores y subraya el compromiso de Colombia con la seguridad jurídica.
El programa “Canguro” de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales es un ejemplo claro de cómo Colombia está apoyando a las PYMES en sus esfuerzos exportadores.
Es un programa que ofrece consultoría y asistencia para reducir los costos de intermediación, fomentando así una mayor participación en el comercio exterior. Además, las Zonas Francas en Colombia cuentan con tecnología avanzada garantizando así operaciones eficientes y seguras.
Colombia se distingue en la región por sus zonas francas de salud, como el Hospital Serena del Mar en Cartagena. Estas zonas no solo avanzan en tecnología médica y atención de calidad, sino que también contribuyen significativamente a la economía y al empleo, reflejando el compromiso de Colombia con la innovación y la salud.
Las zonas francas en Colombia, como Zona Franca Metropolitana, son mucho más que áreas comerciales; son laboratorios de competitividad y sostenibilidad. Con su enfoque en la inclusión de PYMES, un régimen tributario y aduanero favorable, y un firme compromiso con la estabilidad jurídica, estas zonas están facilitando el camino para que Colombia se destaque como un líder en el comercio internacional y el desarrollo económico.
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